Por César Gabler
Recién instalada en los nuevos accesos del Aeropuerto Internacional de Santiago, Nube R, del escultor Cristián Salineros se ofrece como un sólido ejercicio material y poético. Sólido es un decir, porque el impactante volumen, conformado por una extensa retícula metálica, es puro espacio interior. La obra -que semeja tanto el volumen de una nube, como el de una piedra roma- está construida a partir de cientos de celdas metálicas. Vista de cerca, semeja un ensamble de cubos transparentes, que sorpresivamente generan una forma orgánica. Ahí aparece una de las primeras dimensiones poéticas de la pieza, como lo hiciera en “Plegar el Paisaje” su obra instalada en Lo Barnechea, Salineros tensa las relaciones entre geometría y naturaleza. Aquí, sin embargo, se vale de la regularidad del cubo, explotando las variaciones volumétricas que pueden generarse con cortes y cambios de altura en la disposición de las piezas.
Estructuralmente, Nube R recuerda a la arquitectura moderna de edificios con sus armazones metálicos, pero la repetición modular, alterada en este caso, genera una forma redondeada, orgánica, una manera de evocar el mundo natural, a partir del rigor geométrico y la tecnología. La forma sugerida es la una masa inasible y en flujo continuo, una nube. Aquí aparece condensada e inerte y para evidenciar que aquella relación con el referente es abierta -literalmente- el color de la pieza es rojo. También por su solidez asemeja una gran masa pétrea. Nube-Roca, relación casi de contrarios, que el artista resuelve a través de la forma. La nube escultura, como las piedras, descansa de manera permanente y rígida sobre la superficie que la rodea, un pequeño parque, conformado por planta de tamaño reducido, cuyo verdor ofrece un contraste rotundo contra la obra escultórica. La relación entre obra y jardinería aparece resuelta de antemano en el proyecto, cuestión que muchas veces se desatiende, en desmedro de las esculturas. Ya sabemos, esos jardines primorosos, con flores de muchos colores y arbustos que terminan siendo más protagónicos que la obra que acompañan. Caprichos de jardinería municipal.
La pieza conforma así, un volumen virtual desprovisto de masa, ese ideal que se plantearon autores como Niklaus Pevsner, quien ya en los años cuarenta del pasado siglo, valiéndose del plexiglás y el metal, creó piezas cuyo volumen traslúcido, permitía observar el vacío que contenía su interior. Esa paradoja, es la que desarrolla, Salineros -de manera impecable- con esta obra, estableciendo además una experiencia cinética, que, en este caso, no aparece asociada a la abstracción pura y si a una referencia que permite lecturas abiertas, como la propia obra que las inspira.
- TÍTULONube R
- FECHADiciembre 2022
- UBICACIÓNAeropuerto de Santiago, Chile
- MATERIALAcero
- DIMENSIONES7 mts x 3mts x 0,5 mts