“Me gusta provocar el contacto, generar una relación con las personas. Me gusta y pretendo que no se dé una distancia con una obra y que no sea necesario descifrarla por medio de un texto. Creo que la escultura, y en particular la figura humana, puede ser más directa en su vínculo con un espectador que quisiera pueda sentirse parte de lo que está viendo y haga sus propias interpretaciones de acuerdo a su historia y sus percepciones”. Carlos Fernández
En el año 2008 se inauguró la monumental escultura Corte Transversal del artista chileno Carlos Fernández, obra gestionada por la Dirección de Arquitectura y la Comisión Nemesio Antúnez y comisionada por la Coordinación de Concesiones de Obras Públicas, entidades que a través de un trabajo y esfuerzo en conjunto buscan a través de estas intervenciones en el espacio abierto y público establecer una relación más cercana de las personas con la urbe y el territorio. Algo que va en el mismo sentido de lo que ha buscado el artista a través de su práctica escultórica, reconocida principalmente por su trabajo con siluetas antropomórficas, y donde la brecha o muralla que gatillan muchas otras piezas artísticas por su formalidad entrópica e impenetrable, es disminuida gracias a un lenguaje simple, llevando así a que sus obras sean de cierto modo atemporales y vivan a través del tiempo y los emplazamientos que sin duda, van cambiando a la vez que los contextos.
La denominación de la obra comenta sobre los mismos términos usados en disciplinas como la arquitectura, la construcción y por supuesto que el arte escultórico. Así es que esta propuesta viene dada como un corte en la zona central de Chile, país que se destaca por presentar diferentes tipos de niveles geográficos: la Cordillera de los Andes, todo lo que es el Valle Central y la Cordillera de la Costa.
- TítuloCorte Transversal
- Fecha2008
- UbicaciónAutopista Costanera Norte, Santiago, Chile
- MaterialAcero al carbono, pintura epóxica anticorrosiva, cobre
En una porción ubicada entre el Río Mapocho y la Autopista Costanera Norte se dispone la enorme obra de Fernández, la que se puede percibir mejor desde el Puente Carrascal que es uno de los puntos de entrada y salida de la comuna de Renca y que la une con Quinta Normal. Una serie de pilares redondeados sustentan la estructura formada por 6 prismas cubiertos de cobre, material que debido a las condiciones climáticas de Santiago y su polución progresa de una manera distinta en la que podría hacerlo en otro lugar. Se dispone sobre esta conformación 3 esculturas de 3,5 metros que reproducen la morfología humana masculina, las que están dirigidas a cada uno de los hitos geográficos del país mencionados anteriormente, respondiendo a la voluntad de Corte Transversal por dar cuenta de la relación del ser humano tanto con su entorno físico como cultural y social. “Me inspira el ser humano y su entorno, la construcción social que hemos generado, los acuerdos de convivencia que tenemos. Me inspira esta especie de entramado social en el que vivimos y que finalmente grafico en estos volúmenes” ha comentado el artista. Acero al carbono y pintura epóxica anticorrosiva son materiales que también ayudaron a la construcción de esta pieza, la que tiene 15 metros en su punto más alto y 40 metros de largo, lo que en definitiva junto a las columnas intentan permitir la visibilidad a las personas que se desplazan por la autopista.
Corte Transversal se dispone así como una irrupción en la mirada y percepción humana y su conexión con un entorno urbano junto al conocido río capitalino, el que ha sentado un eje de planificación a lo largo de nuestra historia. Impulsar la creación de estas piezas y el desarrollo de estas temáticas debería ser algo fundamental para lograr una fricción en la vida diaria, que llame a un momento de reflexión, y que en el mejor de los casos, logre un replanteamiento de los vínculos que la sociedad tiene cotidianamente con las expresiones de la cultura humana, y por sobre todo, con las otras personas.